El jueves 26 de octubre, con el objeto de conmemorar el Día Mundial del Daño Cerebral Adquirido (DCA) y acercar la realidad del daño cerebral a la sociedad, el Hospital La Pedrera habilitará un espacio en el hall y en el acceso a la puerta principal – de 9:00 a 13:00 h- en el que todas las personas que lo deseen podrán conocer, a través de distintas pruebas, su riesgo cerebrovascular, recibir asesoramiento sobre cómo reducirlo y evaluar sus capacidades cognitivas.
Para esta ocasión, han informado desde el centro sanitario, dispone de un equipo de profesionales para realizar las pruebas que consistirán en la medición de presión arterial, glucemia, cálculo del Índice de Masa Corporal, y una serie de test y pruebas que permitirán determinar su rendimiento cognitivo. Además se proyectarán videos demostrativos de las terapias de rehabilitación que este centro está aplicando a este tipo de pacientes. La feria cuenta con la participación de la Asociación de Afectados por Daño Cerebral Adquirido de la Marina Alta “Cerebrum”.
La jornada forma parte de las actividades que el Hospital La Pedrera organiza para sensibilizar e informar a la población sobre este grave problema y su implicación social, y que se inician el martes 24 de octubre con un taller dirigido a familiares, cuidadores y voluntarios de personas afectadas de DCA e impartido por el equipo de Neurorrehabilitación del Hospital. El objetivo del presente taller es ahondar en los aspectos prácticos del cuidado de un paciente con Daño Cerebral Adquirido. El taller es gratuito y se realizará en el Salón de Actos de 16:00 a 20:30 horas, siendo la asistencia libre.
La principal causa de daño cerebral es el ictus, seguida de los traumatismos craneoencefálicos y enfermedades como las anoxias, los tumores cerebrales o las infecciones del sistema nervioso. Cada año se dan más de 100.000 nuevos casos de Daño Cerebral Adquirido en España. En el conjunto de la Comunidad Valenciana, hay unos 56.000 casos (1600 en la Marina Alta) y se registran cada año unos 8.000 nuevos. Alrededor del 50% de los que sobreviven quedan con unas secuelas con las que cabe trabajar y mejorar la autonomía personal y de participación social.
Una parte importante de DCA podría evitarse teniendo en cuenta sus factores de riesgo y tomando medidas preventivas. Prevenir el ictus pasa por adoptar hábitos de vida saludables que eviten factores de riesgo como el estrés, la obesidad o la hipertensión. Las principales claves para evitar los accidentes cerebrovasculares son: controlar la hipertensión y la diabetes, así como mantener una dieta equilibrada, practicar ejercicio con regularidad, evitar el tabaquismo y el consumo de drogas y limitar el consumo de alcohol. Aunque a medida que nos hacemos mayores nuestro cuerpo sufre más desgaste y tenemos mayor probabilidad de tener un ictus, vivir acorde a estas medidas de prevención nos ayudará a reducir las probabilidades de ACV también a largo plazo.
24 octubre, 2017Por: Redacción