Jesús Pobre emprendió en 2019, un proyecto conjunto con la empresa Magic and Nature y la colaboración de la asociación Acció Ecologista Agró; para el refuerzo de la fauna autóctona como forma natural de combatir las plagas de los campos agrícolas del pequeño municipio y para fomentar la regeneración de especies cuya población se ha visto reducida.
El objetivo del proyecto es restaurar el equilibrio natural del ecosistema de los campos agrícolas de secano de Jesús Pobre con especies bioindicadoras (que ayudan a conocer cuál el estado medioambiental del territorio sobre el que se asientan) y especies plaguicidas propias de la zona que favorezcan el correcto desarrollo de las cosechas suponiendo un hecho diferenciador y de calidad ambiental para los agricultores y las bodegas.
El proyecto consta de dos fases. Una primera, iniciada el año pasado, consistente en la reintrodrucción de dos ejemplares de la lechuza común y tres más durante este año para su adaptación y crianza natural. En la segunda, la concejalía de Medio Ambiente y la empresa gestora han suscrito una colaboración junto a los agricultores locales para la construcción y colocación de cajas nido en las huertas que sean aptas para especies rapaces como el búho, el autillo europeo, el cernícalo, los murciélagos y el alzacola rojizo destacando, de esta última, las especie presentes en cultivos de moscatel y olivos.
Para una mayor consecución de la iniciativa, se han acordado una tercera fase en la que se realice un seguimiento de las actuaciones llevadas a cabo y una cuarta en la que se realizará una campaña de sensibilización ambiental dirigida a la ciudadanía con talleres, rutas y actividades para toda la familia.
Muy buena iniciativa, pero supongo que también deberían consultar a la Diputación de Alicante sobre cómo evitar el ruido que produce la carretera de Jesùs Pobre y que supongo afecta a toda la fauna del Montgo.