La pianista de Xàbia, Marta Espinós, participó en la cena de despedida institucional de Gabriele Finaldi, director adjunto del Museo del Prado durante los últimos trece años y que desde agosto pasará a dirigir la National Gallery de Londres. Espinós ofreció un concierto regalo que sorprendió a los presentes en el acto incluso al que fuera ministro de Asuntos Exteriores de los gobiernos de Felipe González y máximo representante de la política de exteriores de la Unión Europea, Javier Solana, quien dedicó una entrada en su blog a nuestra pianista más conocida.
Según narra la propia Espinós en su web, a la hora de pensar en el repertorio más adecuado para el protagonista y pensó que el pequeño concierto debía ser muy simbólico, «me gustó la idea que tuviera una trayectoria paralela a la Finaldi». Por ello, consistió «en un pequeño viaje musical con el museo del Prado como punto de partida y la National Gallery como destino». El programa incluyó dos pequeños bloques musicales relacionados con cada una de estas dos instituciones.
Espinós acostumbra a comentas las obras que interpeta en sus conciertos. Así en una primera parte fueron dos piezas de Joaquín Turina. Un artista que en 1944 ya apuntó la idea de hacer una obra dedicada al museo más importante de España. Y la segunda parte, interpretó piezas de Myra Hess, una pianista británica que durante la segunda guerra mundial impulsó una serie de conciertos en la Nationall Gallery de Londres para aliviar el vacío cultural y moral de los londinenses.
«Marta nos dejó boquiabiertos»
Entre los invitados, Javier Solana, quien en su blog afirmó:
«Esperando con desgana los discursos correspondientes para estas ocasiones, me sorprendió una joven pianista que tomó la palabra y, con voz delicada, nos explicó el programa que sustituiría a los discursos: dos obras de Joaquin Turina al piano, conmemorando una “La Anunciación”, de Fray Angélico y, la segunda, “Las Lanzas” de Velázquez.
Fue un hermoso descubrimiento para mí, y Marta Espinós las interpretó con maestría.
Terminados los recuerdos de El Prado para Gabriele, Marta nos contó una bella historia sobre la cantata 47 de Bach – antes de interpretarla- y su relación con la National Gallery de Londres. Eran los años de la II Guerra Mundial y una pianista alemana, de nombre Myra Hess, se movilizó para aliviar “el vacío cultural y moral de los londinenses”, impulsando una serie de conciertos populares en la National Gallery, despreciando incluso los bombardeos. La Cantata 47 de Bach cerró el primer concierto.
Marta nos dejó boquiabiertos.
Gabriele se lleva estos dos recuerdos musicales para siempre: Fray Angélico y Las Lanzas de Turina, con El Prado, y la Cantata 47 de J.S. Bach, con las mejores horas de la National Gallery.»
Las fotos: son de © Andrés Valentín Gamazo extraídas de la web de Marta Espinós.
7 julio, 2015Por: Carlos López