LoEn 2017 anunció que la playa sería regenerada
La Conselleria de Política Territorial ha abierto durante este verano el concurso público para la reparación de la escollera del Puerto de Xàbia que fue destrozada durante el temporal de 2017. Un proyecto que tendrá un coste de 125.560 euros y que dará la estocada definitiva a la aspiración vecinal de recuperación de la Cala del Tangó.
Así se puede deducir de los planos que están colgados en la plataforma de Contratación y anuncian el rellenado de la cala con piedra de escollera para evitar que el negocio que hay en la zona se hunda. La acción de los temporales hace que las piedras vayan desapareciendo, y el mar se las lleve a otro punto de la costa y esto se pretende evitar a toda costa.
El proyecto lo deja claro «el propósito de este proyecto es proteger frente a la socavación la base del frente rocoso sobre el que se asienta la terraza del restaurante Tangó, manteniendo al mismo tiempo el valor paisajístico de dicho enclave para alterar mínimamente la situación ambiental actual, y dado que el talud rocoso vertical que sustenta el plano de apoyo del restaurante tangó, ya es en sí mismo un elemento resistente defensivo frente al oleaje, cuya única debilidad es que su base presenta cavidades por las cuales el oleaje penetra y socava el terreno«.
Uno de los planos incluidos en el proyecto donde se dibuja como será el aspecto de la playa una vez se coloquen las piedras de escollera
Por tanto añade el proyectista, «no se trata de construir un dique rompeolas en talud sobre el frente rocoso vertical» algo que a su juicio «produciría un impacto paisajístico desmesurado e innecesario», sino que se trata de «crear una protección con piezas de escollera en cordón monocapa de 4,5 toneladas de peso por canto y diámetro equivalente de 1,2 metros frente a la línea de base del frente vertical rocoso».
En otra parte del proyecto indica que además se renovará el mirador que se construyó hace años en la zona y actualmente se encuentra vallado y en precario.
¿Dónde quedará el anunció del propio Consell tras una reunión entre el alcalde y la dirección general de Puertos en las que se aseguraba que se iba a regenerar la playa? Fue en 2017 tras una visita a la que no fue convocada la prensa.
El Consell anuncia la regeneración de la Cala Tangó y la reforma urgente de la escollera
El monstruo Puertos del Estado o de la Generalitat, me da igual, una vez más se come la costa.
Este verano nuestro Presidente de la Generalitat se paseaba por la escollera abandonada que ahora están llenando de pantalanes flotantes para beneficiar a los pocos y privilegiados usuarios de amarres públicos. Además tal es el aspecto del lugar invadido por coches y muros del club náutico que no dejan pasar a los viandantes que cualquier día nos encontraremos que se prohibe el paso desde el comienzo de la fortaleza llamada Club Náutico hasta el final de la escollera. El bonito paseo que se podía recorrer desde la lonja hasta la luz verde se encuentra bloqueado por un muro infranqueable del club naútico que impide las vistas, la presencia de unos contenedores al aire sin ninguna higiene rezumando líquidos apestosos, una multitud de gatos, pulgas, lujosos coches de los usuarios del club náutico y otros vehículos de plastico subidos en la acera ante la pasividad de la policía local, la guardia civil y el alcalde socialista que se pasea impasible también por la escollera del faro rojo.
Se pierde la que para muchos era la mejor playa de Jávea, por el que para todos es el peor restaurante de Jávea. Una terrible representación de la hostelería de la zona, con unas formas que en nada simbolizan el respeto al turismo y las ganas de dar un buen servicio.
Con esta decisión se va a dar el premio más inmerecido a la gente que más necesitaría un duro castigo por maltratar a todo el que comete el error de acudir a uno de los lugares más especiales de Jávea. Un lugar que han manchado con su bilis y mala sangre. Son y serán siempre mala gente, con un consenso rotundo, y si leen esto que rabien como lo hacen siempre, a ver si les degenera en la mala enfermedad que merecen (dicho con el mismo respeto que ellos predican a los que por falta de información acuden a un lugar que nunca debieron ocupar).
Conozco y me he bañado en la cala Pope, desde 1974, con el tiempo y sin tener que ver la escollera y el restaurante, las aguas han ido subiendo. Si miran lo que han subido las aguas en esto años, se darán cuenta de que la playa iba a desaparecer. Ni defiendo al restaurante, ni a las autoridades ni a nadie. Es lo que he visto en todos estos años.
Esa pequeña playa, cuando se podía acceder a ella sin ninguna traba y que durante muchos años se llamó Playa del Pope, era la mejor de Jávea para el invierno. Como está muy resguardada, te podías bañar en el mes de enero, durante el período de calmas y en el frío febrero, con la única condición de que hiciera sol, porque es tan caliente ese rincón que cuando llevas un rato tienes que recurrir a la fría agua del mar: un verdadero placer que nadie me va a contar porque lo he vivido. Y si subías por la roca del fondo (que estaba habilitada para el caso) y pasabas a la calita que hay detrás, el placentero baño invernal era un lujo único.
El venerable pope se bañaba (en pleno invierno) al fondo de la primera cala, la que va a desaparecer; era un señor mayor, con larga barba blanca y por traje de baño llevaba una especie de camisón blanco; en Jávea se le quería mucho, pues era una excelente persona, afable y educado, que convivía con la vecindad e incluso participaba en las procesiones religiosas junto a don Juan Celda, el entonces párroco de Aduanas. Al principio de la cala, a cierta distancia del pope y respetando su intimidad nos poníamos unos muy pocos bañistas invernales como el doctor Buigues, un empleado de telégrafos y un marinero de Altea que con frecuencia recalaba en este puerto y algún que otro loco del mar, como es mi caso.
Sinceramente, sería una pena que la cala desapareciera; sus excelencias y la historia la avalan, lo normal debería ser lo contrario, potenciarla. Sí, una pena que deberíamos evitar.
Uno de los problemas que se ven en Javea cada año con mayor intensidad es la falta de playas y resulta que eliminamos esta, que aunque sea pequeña es algo y salvamos ese bar que está en un lugar totalmente ilegal y además obstruyendo el paso por la misma línea de costa. Un despropósito total.
O sea, La Siesta la quieren cerrar sí o sí pero el Montgó Di Bongo y este restaurante pueden seguir donde están, esto da para pensar mal si se tiene en cuenta que los dueños de estos dos últimos son de Xàbia y el de La Siesta no, además de que este restaurante de la foto afecta mucho más a la costa que los otros dos. En mi opinión, debemos recoger firmas para que traspasen ese local a otro lugar del puerto y regeneren la playa.
Hombreeee… es que los propietarios de ese restaurante son tan simpáticos y educados que solo con su simpatía y buenos modales seguro que han conseguido convencer a la Consellería de turno para que les permita seguir ocupando un espacio público e impidiendo el paso a lo que queda de la cala por los siglos de los siglos.
Cierto. son simpatiquísimos, una delicia ir a ese local, qué manera de entregarse, de atenderte, de deshacerse por hacer de tu estancia un placer asiático….
(IRONIC MODE: ON)
jajajjajaaa
Realmente son famosos por las buenas risas que se echa uno, con su «buen rollo»
Todavia me acuerdo de esa familia que paró allí un verano, venían de Madrid, atasco de los gordos y el padre empeñado en llegar al mar, al mismo mar..
Llegaron hasta «el fondo», hasta emblemático Restaurante (BAR). Hubo tan buen rollazo, que sin acabar de comer, pagaron, subieron al coche y a Madrid, tal cual!!!!
Jamás volvieron a Jávea!!! jajajajjajaj
Si, si son simpatiquisimos u educadisimos, da gusto con ellos…
No voy a ese sitio ni aunque me invitarán y luego me pagarán las copas….
La cala se destruyó al hacer la escollera del puerto.
Nada de negocio 1 cala 0.
Lo que hay que hacer es quitar el chiringuito y regenerar la playa.
Que llàstima pedre una platja, per un bar que s’ha estat aprofitant sempre del domini públic marítim, i que sempre ha estat impedint el pas als banyistes i viandants.
Fora al bar, que el tomben, i tindrem mes gran platja per a disfrutar-la tots!!
Que vergüenza y despropósito. Sacrificar una playa preciosa de uso público para salvar a un restaurante que no tiene razón de ser ni de existir en el sitio en el que está.
Hoy en día sería ilegal construir ahí, así que dejad que venga un temporal y punto, así liberamos la costa que generará ingresos para todo el pueblo
Además, la playa está cerrada por riesgo de desprendimientos, ¿no existe riesgo también para los clientes de dicho local?
Em fin, para reglar playas ni un duro, para salvar negocios que invaden el litoral y además obstaculizan el paso a la playa lo que haga falta.
Por último añadir que quien se atreva a pasar a la playa por el único sitio posible, el pasillo de la terraza del local, se llevará una buena regañina por el gerente de dicho sitio. PATETICO
A ver si lo he entendido bien: Que tendremos que pagar 125.000 euros entre todos para que el chiringuito no se hunda ?. ( Nunca mejor dicho). Debe ser una broma seguro…
Sólo espero q los partidos de la oposición tomen la palabra, alto y claro, porque el insigne diputado Chulvi no dirá está boca es mía. Tal vez vuelva a escribir a la consellera de Compromiso, Mollä, porque a Puig y España no se atreve.
Negocio privado 1 – playa pública 0
No hay var, ni penaltis